domingo, 29 de julio de 2018

Estación de Carabaña

En 1910 se inaugura, como parte del tramo Morata-Orusco del Tren del Tajuña, la estación ferroviaria de Carabaña y un apeadero junto a la Central Eléctrica de Chávarri. Su principal objetivo era facilitar la distribución de los productos agrícolas de esta zona en Madrid y, por supuesto, de “Agua de Carabaña”. Gracias a él la embotelladora incrementó su producción.
Durante la Guerra Civil, a pesar de hallarse truncado su recorrido por el desplome de un puente en Arganda, fue la tabla de salvación de muchos madrileños. Estos veían en estas tierras la solución a la carestía de alimentos durante los años más crudos de la contienda.
En el año 1938 ante el desabastecimiento de la capital, el presidente Juan Negrín ordena la construcción de una línea ferroviaria entre Torrejón de Ardoz (Madrid) y Tarancón (Cuenca). En tan solo 40 días se resuelve su instalación y de ahí su nombre: el Tren de los Cuarenta Días. 
La línea ferroviaria de Arganda dejó de funcionar en la década de los cincuenta del siglo XX y, tras un tiempo de decadencia, se restauró la estación. 
La estación, un edificio de pequeñas dimensiones, es de un estilo sencillo propio de su época

(Ayuntamiento) 

Mediano - La Fueva

La historia de este Mediano le llevó a ser vendido en 1460 a Rodrigo Cebollero. Poco a poco fue creciendo hasta que llegó a las 20 casas y 223 habitantes. Hasta 1970 tuvo su propio ayuntamiento, hasta que en 1974, con la creación del pantano que lleva el mismo nombre del pueblo, el municipio acabara inundado y al mismo tiempo incorporado dentro de La Fueva, quien regenta el consistorio actualmente.

(Clubrural)

Minas de Gavá Can-Tintorer - Barcelona


Con el nombre de minas prehistóricas de Gavá-Can Tintorer se designa un amplia área situada en Gavá que comprende yacimientos arqueológico del neolítico y zonas contiguas de la sierra de Les Ferreres, áreas que por los diversos vestigios arqueológicos detectados y sobre todo a causa de su configuración geológica están vinculadas al mismo yacimiento minero del que formaba parte el área de Can Tintorer.
Este yacimiento constituye la primera gran explotación minera subterránea neolítica hallada en la península Ibérica y en el contexto europeo, es el único yacimiento con pruebas evidentes de explotación de la calaíta a gran escala.

(Pueblos fantasmas de Cataluña)

Matas - Guadalajara

Pedanía de Sigüenza, Matas se encuentra despoblado, entre las localidades de Riosalido y Ures. Tuvo la aldea una iglesia románica del siglo XII, de la que hoy tan sólo quedan ruinas, dentro de la cual se veneraba una virgen románica de la Baja Edad Media, que hoy se conserva en el Museo Diocesano de Sigüenza.

(Zumo de piedras)


Espluga de Cuberes - Lérida

Situado en el municipio de Baix Pallars, en la provincia de Lleida, Espluga de Cuberes se presenta como un pueblo troglodítico por estar inmerso en las cuevas de una concavidad montañosa, frente a un precipicio situdado sobre el barranco del Infierno.
Los restos de la iglesia de Santa Coloma de l’Espluga junto a los de 2 edificaciones más, es apenas lo que queda en pie de este curioso pueblo.
Espluga de Cuberes aparece mencionado en 1173 cuando era denominado como Splenucha y pertenecía a los condes Artau II. Pascual Madoz en su Diccionario Geográfico y Estadístico de 1850, señala que existían 6 casas y que los niños acudían a la escuela en Gerri por un camino en mal estado. La correspondencia también llegaba desde Gerri dos o tres veces a la semana.
En las proximidades puede encontrarse la ermita dedicada a Nuestra Señora de Esplá.
El terreno se muestra como áspero y de mala calidad por lo que la mayoría de su producción era de origen animal, ya sea mediante la cría del mismo o la caza menor.
Es increíble imaginar el estilo de vida que llevaban estas personas. Tal vez protegidos por la fe, tal vez por la tradición o por ser la única de forma de vida que conocían, estos pueblos nacieron y crecieron en terrenos tan abruptos que sin embargo, le permiten tener una estrecha relación con el entorno y la naturaleza.

(Pueblos del Olvido) 

Albocabe - Soria

Albocabe es un despoblado perteneciente a Aliud en la provincia de Soria.
Con topónimo de origen árabe, se trata de un señorío perteneciente a Joaquín Carrillo, vecino de Vinuesa según el Catastro de la Ensenada. Por aquellas épocas, siglo XVIII, solamente 2 vecinos habitaban el poblado y la mayoría de los edificios se encontraban en ruinas.
Posteriormente, en 1860, Albocabe aparece como habitado por 8 vecinos y 7 casas de pobre construcción. Albocabe sin embargo, se muestra rodeado de manantiales y exquisitas aguas que daban lugar a viñedos, olivares y algún arbolado siendo así, un terreno fértil.
A mediados del siglo XIX,  se comenta que la iglesia dedicada a San Miguel estaba ya en ruinas. Aún así, pueden observarse algunos ornamentos e inscripciones en el interior de la iglesia.

(Pueblos del Olvido)