domingo, 25 de febrero de 2018

Mansilla de la Sierra - La Rioja

El pueblo de Mansilla de la Sierra, en La Rioja, estaba bañado por los ríos Gatón, Najerilla y Cambrones. Fue un asentamiento romano construido todo en piedra, lo que le aportaba un gran valor paisajístico, de hecho, hasta el pavimento de sus calles (el pedernal) era el emblema del mismo.
Durante el periodo republicano, y dentro del marco del Plan Hidráulico, para dar a agua a las huertas riojanas, se
decidió construir un embalse. En 1900 el pueblo tenía 600 habitantes y sus buenos años de prosperidad le dotaron de servicios tales como farmacia, médico, cuartel de La Guardia Civil… Sin embargo, el Gobierno de la República en su estudio del plan hidrológico, había elegido este punto, por la confluencia de los ríos, para la construcción de una presa que embalsara el agua para riego y electricidad de los pueblos del Alto-Najerilla, y que como todo buen proyecto, existía una variante, hacer la presa mas abajo, de forma que cogiera el río Urbión, y entonces el pueblo de Mansilla, no sería inundado.
Al no poder llevar a efecto este plan por la guerra civil, el gobierno de Franco que lo desarrolló, decidió la inundación del pueblo, ya que la otra variante implicaba un nuevo trazado de carretera, que sería más costoso.
Así es como este pueblo, en esta ocasión por decisión humana y no por la fuerza de la naturaleza, desapareció bajo el agua. Hoy la zona, con las aguas retiradas, deja un paisaje cuanto menos melancólico de construcciones de piedra que reflejan lo que una vez fue Mansilla de la Sierra.

(El Tiempo)

No hay comentarios:

Publicar un comentario